PARA ESTUDIO: Hechos 13 - 14.
LECTURA DEVOCIONAL: Hechos 10:34-43.
TEXTO PARA MEMORIZAR: Hechos 13:2.
 

LECTURAS DIARIAS

LUNES: Un Nombramiento Divino.  Hechos 1:21-26.
MARTES: Apartados por el Espíritu Santo.  Hechos 13:1-5.
MIERCOLES: El Espíritu Fortalece.  Hechos 1:6-11.
JUEVES: El Espíritu Guía.  Hechos 16:6-10.
VIERNES: Enviados del Señor.  Juan 20:19-23.
SABADO: Enviado a los Gentiles.  Hechos 28:23-28.
DOMINGO: Ungidos por el Espíritu Santo.  Hechos 10:34-43.
 

PROPOSITO

 Considerar otra vez el interés divino hacia todo el mundo y nuestra responsabilidad de evangelizar a todas las naciones.
 

PARA DISCUSION Y ESTUDIO

1. ¿Sigue en estos días el Espíritu Santo apartando a hombres que se dediquen a una función específica dentro de la iglesia?  Comente.

2. ¿Cuál es la actitud que debe tener la iglesia cuando observa que entre los fieles hay alguno que muestra idoneidad para la tarea personal?  Comente.

3. ¿Puede el Espíritu Santo equivocarse en este aspecto?  Discuta.
 

EXPOSICION DE LA LECCION

INTRODUCCION

 La semana pasada terminamos la lección con Pablo y Bernabé ministrando a la iglesia de Antioquía.  Y fue precisamente en esta iglesia donde los creyentes fueron llamados por primera vez, quizá como un apodo despreciativo o como otros han deducido, que tal vez se debió a las vidas tan ejemplares que vivían los gentiles convertidos.  La obra de Antioquía había sido el resultado de los esfuerzos evangelísticos de aquellos que habían sido esparcidos durante la persecución del tiempo de Esteban (Hechos 11:9).  Felipe había ido a Samaria y Gaza, Pedro había ido a Jope y otros más se habían ido a Damasco (Hechos 9:10), y ahora estos se encontraban en Antioquía de Siria.  El ministerio evangelístico en Antioquía era llevado a cabo entre los judíos (11:19), y entre los gentiles (v. 20).

 Hacia el final del primer año del ministerio en Antioquía, Agabo, uno de los profetas, anunció que se acercaba una gran hambre en todo el mundo.  Dicha predicción ocurrió en días de Claudio César (11:27).  Pera ayudar a los cristianos de Jerusalén en tal desastre, la iglesia de Antioquía distribuyó de su abundancia a sus hermanos que habían dado mucho para tantos (4:34; 6:2).  Su generosa ofrenda fue enviada a Jerusalén por medio de Bernabé y Pablo (11:30).

 De la estancia de Pablo y Bernabé en Jerusalén solamente podemos sacar puras conjeturas aparte de lo que nos dice la Palabra.  Sin embargo, la Escritura dice que durante su estancia en aquel lugar, "la palabra del Señor crecía y se multiplicaba" (12:24).  Las oportunidades para predicar, testificar y evangelizar eran abundantes y ellos no las desperdiciaron.

 Pero muy pronto los futuros misioneros regresaron a su puesto en Antioquía (12:25), llevando con ellos a Juan Marcos, un pariente de Bernabé (Colosenses 4:10), quien les serviría como asistente (13:5).  Tan pronto como regresaron a Antioquía, ellos se metieron de lleno a la tarea encomendada por el Señor en tal forma, que al Espíritu Santo le agradó encargarles una tarea de mayor responsabilidad.
 

I.  UNA IGLESIA ESPIRITUAL
    (Hechos 13:1-2a)

 ¿Bajo qué condiciones, el Espíritu Santo les anunció su voluntad?

1. PROFETAS Y MAESTROS (v. 1)

 Una buena señal de la iglesia que es espiritual, es vista cuando algunos de sus miembros son llamados por el Espíritu Santo al servicio cristiano activo.  Tal era el caso de la iglesia en Antioquía.  Las palabras del verso 1, "Había entonces ... en Antioquía, profetas y maestros ..."; parece ser una indicación que había más de los cinco que se mencionan

 Tal vez la razón que Lucas tuvo para mencionar el origen y nacionalidad de los cinco líderes sobresalientes de la iglesia de Antioquía se basaba en el hecho de probar el carácter internacional de aquella iglesia próspera, para recalcar la obra del Espíritu Santo en llevar a cabo la gran comisión.  Esta iglesia fue entonces, "el único punto lógico desde donde se lanzaría la gran misión entre los gentiles ... el cristianismo ya no era una secta del judaísmo sino una religión que conquistaría el mundo (BBC).

 En este pasaje se notan dos oficios primordiales: Enseñando, predicando, de acuerdo al Nuevo Testamento quiere decir, la proclamación de las buenas nuevas de la resurrección de Jesucristo, del perdón de pecados por medio de la fe en Cristo.  Profetizando, era la predicación de eventos futuros como función secundaria del ministerio de la predicación.  La enseñanza era una función vital en el ministerio de estos hombres, era necesario que los convertidos llegaran a alcanzar la madurez en la fe.  Nuestras iglesias deben ser centros de evangelismo, pero también deben ser centros donde se imparte la instrucción de la Palabra y doctrina, como preparación para llevar adelante la Gran Comisión.
 

2.  "MINISTRANDO Y AYUNANDO" (v. 2a).
 

 En el sentido que se usa la palabra "ministrando", en este pasaje, lleva la implicación de los actos de adoración como, meditando, orando, cantando y participando de la comunión con el Señor.  Y sin duda que en aquellos momentos de súplica espiritual al Señor, Pablo estaría pensando de su experiencia en el camino a Damasco (Hechos 9), repitiendo en su conciencia y corazón: "de los gentiles, a quienes ahora te envío" (26:17).  Al acordarse Pablo del llamado, sin duda que elevó la siguiente oración, "Señor, cómo debe llevarse a cabo el llamamiento que me diste?

 La iglesia de Antioquía era una iglesia espiritual.  Cuando el Señor todavía estaba sobre la tierra, sus discípulos no ayunaban (Mateo 9:14-15).  Se ha recalcado que en los primeros días de la iglesia cristiana, el ayuno no se mencionaba como arte de la adoración.  Sin embargo, al enfrentarse con tan seria responsabilidad, estos líderes se pusieron a ayunar.  El ayuno era una parte vital de su adoración.
 

3.  "DIJO EL ESPIRITU SANTO" (v. 2a).

 En medio de aquellos ejercicios espirituales, el Espíritu Santo les habló.  El le habla a los hombres que puede usar y en quienes puede confiar; hombres de visión y pasión por el mundo.  El Espíritu Santo da a conocer su voluntad en una iglesia espiritual.  Los jóvenes serán llamados al servicio cristiano en la iglesia donde la voz de Dios puede ser oída.  Si su iglesia no ha experimentado un llamamiento entre su juventud al servicio cristiano, es tiempo de que la congregación se ponga en oración y ayuno como lo hicieron estos predicadores y maestros de Antioquía.

II.  LOS PRIMEROS MISIONEROS
     (Hechos 13:2b)

 ¿Cuál fue el mensaje comunicado por el Espíritu Santo?
 

1.  "APARTADME A BERNABE Y A SAULO"

 Estos hombres estaban llenos del Espíritu Santo (9:17; 11:24; 13:9), por lo tanto fueron escogidos por el Espíritu Santo (v. 2), y también fueron enviados por el Espíritu (v. 4).  Así como lo mejor de los animales para el sacrificio de acuerdo a la economía del Antiguo Testamento.  Hombres como estos deben ir, son los que Dios quiere para su servicio (Hechos 1:8).  El Charles W. Cartes hace el siguiente comentario al respecto:

 "La selección para el servicio divino está condicionada a la relación espiritual con Dios, al carácter moral, a los dones y gracia especial, y al celo santo por Cristo.  El llamado para un servicio especial debe caracterizarse por: primero, un período inconsciente de preparación; segundo, un conocimiento secreto e interno de la voluntad de Dios; tercero, el reconocimiento y confirmación del llamado por la iglesia; cuarto, un período específico de preparación; quinto, dedicación humana al llamado de servicio; sexto, una puerta abierta de ejercicio; séptimo, un ministerio fructífero (vea Juan 15:16).  Un examen cuidadoso revelará que Bernabé y Pablo reunieron estos requisitos".
 

2.  "APARTADME"

 Esta palabra "apartadme" habla de la consagración pública a la tarea que el Espíritu Santo espera (Lucas 9:62).  El ministerio cristiano nunca debe tomar la consideración secundaria en el llamado del hombre por Dios.  Debe ocupar siempre el primer lugar.  "El servicio más humilde requerido de nosotros de acuerdo al llamado divino, es de gran honor y mérito de ser realizado; los dignatarios más elevados no merecen ser el objeto de nuestro esfuerzo" (Lange).  Con justa razón Pablo le escribió a Timoteo en relación con el ministerio: "Tú, pues, sufre penalidades como buen soldado de Jesucristo.  Ninguno que milita se enreda en los negocios de la vida, a fin de agradar aquel que lo tomó por soldado" (II Timoteo 2:3-4).

3.  "PARA LA OBRA"

 Los hombres que fueron llamados por el Espíritu Santo, fueron llamados a trabajar.  Ellos no fueron buscando ganancias personales, ni seguridad terrenal o comodidades.  Fueron buscando la meta del que es lleno del Espíritu: ser testigo de Cristo en el poder del Espíritu Santo (Hechos 1:8).

 A estos dos misioneros les esperaban viajes por tierra y por mar.  Tendrían que caminar de ciudad en ciudad, largas jornadas, aquel sería el trabajo.  Los viajes solitarios, las largas caminatas, el dormir al aire libre, la oposición de sus compatriotas, requerían hombres equipados física y espiritualmente.

III.  FUERON ENVIADOS
      (Hechos 13:3-4)

 ¿Cómo se implementó la voluntad del Espíritu Santo?

1.  AYUNANDO Y ORANDO (v. 3).

 Sin duda que al verse frente a la responsabilidad referida por el Espíritu Santo, los misioneros y la congregación se reunieron para pedir su dirección y sostén en todo lo que les esperaba por delante.  Sin duda que fue impresionante ver no sólo a los maestros y predicadores despidiendo a los misioneros, sino que lo más probable es que toda la congregación se reunió para decirle adiós a sus amados hermanos.

2.  "LES IMPUSIERON LAS MANOS (V. 3).

 No sabemos con seguridad si los que les impusieron las manos fueron los profetas y maestros, o fue toda la iglesia, a lo menos en una forma simbólica.  Aquel acto fue el reconocimiento que la iglesia hacia del llamamiento que el Espíritu Santo había hecho a aquellos dos hombres.  También era una demostración de la participación de todos los miembros en aquel evento misionero.  Hasta podríamos ver una autorización oficial y bendición (vea Hechos 6:6-7).  En todo esto se ve la dirección del Espíritu Santo instituyendo ritos y formas que se usaron en la iglesia primitiva, muy apropiadas para la ocasión.  Aquel fue un evento sin precedente en la historia de la iglesia, "el principio del grandioso programa misionero" (BBC).

3.  "POR EL ESPIRITU SANTO" (v. 4).

 En ninguna parte se menciona que los apóstoles hubieron estado presentes en aquel servicio misionero de despedida.  Bernabé y Pablo no eran enviados por la aprobación de los hombres sino por indicación del Espíritu Santo.

 Aquellos misioneros y predicadores que son enviados únicamente por la iglesia, sin tomar en cuenta al Espíritu Santo, no son enviados en el sentido expresado por el Nuevo Testamento.  Por eso Pablo podía escribir con toda sinceridad, "De ninguna cosa hago caso, ni estimo preciosa mi vida para mí mismo" (Hechos 20:24), y "no fue rebelde a la visión celestial" (Hechos 26:19).  Pudo haber sucedido que Marcos quien viajó con ellos por algún tiempo como su ayudantes (13:5), pero más tarde se separó (13:13) no tenía un llamamiento divino para aquella misión.  Por lo menos no se menciona en ninguna parte que el Espíritu Santo hubiera asignado a Marcos para aquella tarea en particular.

IV.  PREDICANDO LAS BUENAS NUEVAS
     (Hechos 13:5; 14:21-28)

 ¿A qué trabajo habían sido llamados?

1.  "ANUNCIABAN" (v. 5).

 La tarea primordial de los misioneros era la predicación.  Ese fue el método escogido por Dios para dar a conocer su evangelio (Romanos 10:14-15).  El hecho es que el único trabajo que se requería de ellos era la predicación, cualquier otro trabajo era secundario.  El corazón de la predicación sería Jesucristo, "todo aquel que invocare el nombre del Señor, será salvo" (Romanos 10:13).

 Los misioneros salieron a cumplir con su cometido, predicando en muchas de las sinagogas de Chipre con gran éxito.  Después siguieron en otras ciudades donde anunciaron el evangelio primeramente a los judíos y luego a los gentiles (13:36).  Perge y Panfilia, después en Antioquía, Iconio, Listra y Derbe, en donde grandes multitudes judíos y griegos creyeron (14:1).  Su ministerio estuvo acompañado de grandes milagros (14:8).  El llamado de Pablo al ministerio fue poderosamente confirmado por el Espíritu Santo (Gálatas 2:8).

2.  CONFIRMANDO (v. 22).

 Los misioneros sufrieron al grado de que fueron apedreados (14:9), en su camino a Derbe.  Sin embargo, en vista del gran número de convertidos, los predicadores regresaron por el mismo camino a pesar de las persecuciones que habían sufrido.  Ellos tomaron esa decisión para confirmar y fortalecer la fe de los que habían creído, confirmando (v. 22), exhortándoles (v. 22), los encomendaron al Señor (v. 23).  "Diciéndoles: Es necesario que a través de muchas tribulaciones entremos en el reino de Dios" v. 22).

3.  "CONSTITUYERON" (v. 23).

 Los misioneros no podían permanecer por largo tiempo en ninguna ciudad.  Por lo tanto tenían que hacer algo para mantener los resultados de su trabajo y ministerio.  Con tal propósito constituyeron ancianos para que procuraran el interés espiritual de cada una de las congregaciones.  "Y constituyeron ancianos en cada iglesia, y habiendo orado con ayunos, los encomendaron al Señor en quien habían creído" (v. 23).

4.   REFIRIERON (vrs. 26-28)

 Los misioneros finalmente llegaron a la iglesia de donde habían salido, estarían listos a dar un informe de lo que habían hecho.  Con la conciencia que Dios había sido el que les había abierto las puertas para predicar la fe entre judíos y gentiles, los misioneros concedieron toda la honra y gloria a Dios, contando cuán grandes cosas había hecho Dios con ellos.  El trabajo iniciado entre los gentiles en el primer siglo, nos sigue alcanzando en nuestro día.  ¡Gloria sea a su nombre!
 

CONCLUSION

 Parece que la mayor parte del cristianismo ha invertido los valores, ha cambiado el método.  Todo el mundo sabe tanto, y piensa y dice que la época ha cambiado y que todo es diferente de modo que ya no se practican dos cosas: el ayuno y el dejar que el Espíritu Santo hable y seleccione a sus ministros.  Pero, donde todavía hay lugar para estas cosas, sigue sucediendo como en aquellos tiempos: El Espíritu llama al santo ministerio, habla a la Iglesia y envía.

 El mundo no está en menor necesidad que en aquellos tiempos.  Todavía rige: "Orad al Señor de la mies que envíe obreros a su mies".  La iglesia no tiene el derecho de llamar al ministerio.  Es prerrogativa del Espíritu Santo.  Por todas partes se oye el gemido: Faltan obreros.  La necesidad es tremenda.  No hay duda de que pasan dos cosas: La iglesia no ora al Señor de la mies; y algunos no quieren oír o no quieren ir.  Es una tragedia.

 Mientras el diablo nos entretiene con especulaciones de carácter materialista, mientras nos hace perder la visión con las ambiciones mundanas aunque algunas veces parezcan legítimas, vamos perdiendo el fino oído espiritual para escuchar la voz que nos ordena: Id.  Y la iglesia debe seguir enviando a quienes están dispuesto a obedecer nunca sabemos qué hay del otro lado de un hombre y una iglesia obediente.  Este mundo está lleno de maestros, profesores, médicos, comerciantes, financistas, filósofos, legistas, pero hay una sola clase de personas a quienes el Espíritu llama y envía.  Vale la pena ir adelante con ese glorioso plan.  Es el mayor privilegio que un hombre puede recibir; la mayor gloria que una iglesia puede apetecer: ser una iglesia misionera por el Espíritu.