PASAJE PARA ESTUDIO: Se estudiarán varios textos.
LECTURA DEVOCIONAL: Isaías 53.
VERSÍCULO PARA MEMORIZAR: Gálatas 4:4.
PROPÓSITO
Apreciar el costo de nuestra redención y ver cómo Cristo cumplió muchas profecías en su vida terrenal
INTRODUCCIÓN
En nuestro estudio, veremos varias profecías que fueron pronunciadas cientos de años antes de la venida de Jesús en esta tierra. Alguien preguntará: “¿Hay profecías en el libro de los Salmos?” Sí los hay. Recuerde lo que Jesucristo dijo después de su resurrección en el camino a Emaús. “Estas son las palabras que os hablé, estando aún con vosotros: que era necesario que se cumpliesen todas las profecías que están escritas de mí en la ley de Moisés, en los profetas y en los salmos” (Lucas 24:44). Esto significa que gran parte de los Salmos son profecías.
I. ¿QUÉ QUIERE DECIR EL CUMPLIMIENTO DEL TIEMPO? (Gálatas 4:4)
1. Hace 2000 años, los judíos que hablaban el griego tradujeron el Antiguo Testamento a ese idioma. El griego es muy expresivo, capaz de comunicar las verdades que Dios quiso enseñar. Tanto el Antiguo como el Nuevo Testamento fueron escritos por hombres capacitados por Dios mismo.
2. Los romanos habían conquistado casi todo el mundo conocido en ese tiempo. Impusieron el griego como idioma oficial en todas sus colonias. Había muchos judíos viviendo en muchos de los centros comerciales del reino romano. En sus sinagogas se congregaban los judíos y los gentiles prosélitos que hablaban el griego. Así, Dios proveyó el medio para que ellos entendieran las bases de la fe y las enseñanzas divinas.
3. Los romanos tuvieron un sistema de leyes que aplicaban a los países subyugados. Habían construido buenos caminos entre todos los centros y ciudades importantes del reino.
4. Perfeccionaron varios métodos para matar a los infractores de sus leyes, uno de los más nuevos y más cruentos era el método de la crucifixión.
5. El emperador romano, teniendo dominio sobre los judíos, podía mandar a censarlos cuando él deseaba. El censo del que leemos en Lucas 2:1-2, no era el primero, pero en esta ocasión propició el cumplimiento de una profecía.
Cuando todo estuvo preparado, “vino Jesús, nacido de mujer, nacido bajo la ley para redimir a los que estaban bajo la ley, para que recibiesen la adopción de hijos”. Por eso, en la Navidad, se celebra el nacimiento de Jesús, quien vino a este mundo para enseñarnos el camino que nos lleva hasta Dios el Padre. Debemos aclarar que Jesús no nació el 25 de diciembre. Sin embargo, es importante que celebremos su nacimiento en cualquier fecha del año.
El libro de Mateo menciona 16 eventos en la vida de Jesús, asociados con estas palabras: “para que sea cumplido”. Véase Mateo 1: 22; 2:15; 4:14; 8:17, y otros textos que tratan de eventos en la vida de Cristo. Jesús iba cumpliendo todas las profecías que fueron escritas acerca de Él, sin faltar ningún detalle.
El salmo 78:2 dice: “Abriré mi boca en proverbios; hablaré cosas escondidas desde tiempos antiguos”. Hallamos esto en Mateo 13:35, donde Jesús hablaba por parábola a la gente. Sin parábolas no les hablaba. ¿Por qué? Porque la persona que deseaba entender sus enseñanzas, al poner atención y meditar en lo que escuchaba, podía entenderlo perfectamente. Nosotros valorizamos más lo que nos cuesta. Lo que no nos cuesta lo valoramos de menos.
Los principales sacerdotes y los escribas estaban muy molestos porque oyeron que la gente gritaba estas palabras, que eran como un anuncio de la llegada de su Mesías. Su enojo y sus palabras duras, reflejaban un rechazo deliberado hacia Jesús (Mateo 21:15-16).
Nosotros sabemos que Jesús es hijo de David (Mateo 1:1). ¿Qué dice nuestro Salmo? Alguien ha dicho que al leer este Salmo debemos leerlo reverentemente; y aun quitarnos los zapatos, como hizo Moisés delante de la zarza; porque si hay un lugar santo en las Sagradas Escrituras, es en este Salmo. Acerquémonos a Él con gratitud en el corazón por el sacrificio de Cristo, el Hijo de Dios. Veamos el abandono, el dolor y la angustia física que Cristo sufrió para proveernos la salvación. En todo esto no hay duda que Él era cien por ciento hombre y cien por ciento Dios.
El Salmo 22 fue escrito por el rey David, como mil años antes de Cristo. Partes del Salmo son su experiencia. Sin embargo, son una serie de profecías acerca de la muerte y la resurrección de Jesús, el Hijo de Dios.
A. ABANDONADO (Salmo 22:1)
¿Por quién fue abandonado? Por un instante Jesús fue abandonado por Dios el Padre. No fue abandonado por haber pecado, pues ni Pilato, ni los líderes religiosos podían presentar casos de pecado en la vida de Jesús (Juan 8:46; 18:38; Lucas 23:4-14). En la cruz, Jesús tomó sobre sí el pecado del mundo; Él fue hecho pecado por nosotros. Él fue nuestro sustituto. Por eso hubo tinieblas cuando Dios obscureció el sol hasta la muerte de su Hijo. Jesús estuvo privado de la presencia de su Padre mientras estaba colgado en la cruz por causa de nosotros.
“¿Por qué estás tan lejos?” Dios no le contestaba. “Clamo de día y clamo de noche". Él clamó antes de las tinieblas y durante las tinieblas, y no tenía respuesta alguna.
B. LA SEGUNDA PARTE AMARGA FUE LA BURLA DE LOS HOMBRES
¿Qué hacían los hombres antes de la crucifixión?
C. EL SUFRIMIENTO DE NUESTRO SEÑOR, ANTES DE SER CRUCIFICADO
1. En Getsemaní, Judas Iscariote, uno de los doce apóstoles, lo traicionó (Marcos 14:10-11; 43-46). Esto fue profetizado en el Salmo 41:9.
2. En Getsemaní, los discípulos lo abandonaron (Mateo 26:56; Marcos 14:50). Esta profecía se encuentra en el Salmo 38:11; 69:20.
3. Los soldados de Herodes lo escarnecieron y se burlaron de Él (Lucas 23:11).
4. Los soldados del Templo también lo escarnecieron (Lucas 22:63-65). Esto fue brutal. Le golpearon en la cara con los puños, y tal vez con varas y otro instrumento (Marcos 14:65).
5. Pilato lo entregó en manos de sus soldados para que lo azotaran (Mateo 27:27-31). En el tiempo de Jesús, para azotar a los reos se utilizaba un látigo que estaba hecho de varias tiras de cuero o lazos. En cada punta de las tiras tenía trozos agudos de huesos o plomo, que desgarraban la carne del cuerpo de la persona. El verdugo que aplicaba los azotes siempre era un hombre fuerte. La idea era que el reo pronto iba a morir, y, por lo tanto, había que azotarlo bastante para que su muerte en la cruz no tardara mucho. Ningún soldado deseaba ser nombrado para realizar la crucifixión de un reo. Era algo terrible. Imaginémonos el gran sufrimiento de Cristo en la cruz.
6. La cruz era muy pesada. Jesús había perdido mucha sangre durante la noche; por eso en el camino al Gólgota, cayó bajo su cruz. Luego le dieron la cruz a otro hombre para que la cargara.
7. La muerte por crucifixión era la más cruenta y horrorosa que los romanos aplicaban a sus víctimas. Desnudaban al reo y lo acostaban sobre los trozos medio labrados; le estiraban los brazos hasta donde fuera posible, le metían clavos en las manos y con grandes golpes los clavaban contra la madera (Salmo 22:16). Luego le juntaban los pies y los clavaban de la misma manera. Seguidamente levantaban la cruz y con gran fuerza lo dejaban caer en el agujero que abrían en la tierra. A causa del peso del cuerpo, el reo era estremecido del gran dolor.
Jesús tuvo que pasar por todo este sufrimiento cruel, causado por el pecado de todos nosotros. El Salmo 22:14 dice: “Mis huesos se descoyuntaron”. “Contar puedo todos mis huesos; entre tanto que me miran” (Salmo 22:17). El dolor le causó gran sudor y debilidad a Jesús.
Cerca de Jesús crucificaron a dos reos. Uno a la derecha y otro a la izquierda (Mateo 27:38); de esta manera se cumplió la profecía que dice: “y fue contado con los pecadores” (Isaías 53:12).
Mientras las víctimas estaban en la cruz, los soldados estaban viendo la ropa de los tres reos. Ellos tenían que mantener su equipo con buen brillo. Por eso la ropa de los reos tenía valor para ellos. Echaron suerte sobre la túnica de Jesús porque era tejido de una sola pieza, muy especial; por esa razón no la partieron, sino echaron suertes para ver a quién le quedaba (Salmo 22:18; Juan 19:23-24).
¿Cuál fue el día de la crucifixión? Es seguro que fue el día de la Pascua, o sea, el mes de Nisán. Los judíos iban a comer la Pascua al anochecer. El día siguiente era día muy sagrado para ellos. Por eso pidieron a los soldados que no dejaran los cuerpos colgados allí más que sólo ese día. Eso causó un problema para los soldados, porque a veces costaba días para que murieran los reos. A las 3 de la tarde oyeron las palabras de Jesús: “Consumado es”, y vieron que Él murió (Juan 19:30). Decidieron quebrar los huesos de los otros dos para adelantar su muerte. Al acercarse al cuerpo de Jesús, vieron que estaba muerto y metieron una lanza en su costado para comprobarlo. El Salmo 34:20 dice: “El guarda todos sus huesos; ni uno de ellos será quebrantado”. ¿Por qué hicieron así con Jesús? Porque así quiso Dios. En Juan 19:28 dice que Jesús tuvo sed. Ellos le dieron vinagre (mezclado con drogas) y Él expiró. El Salmo 69:21 profetizó esto. Lucas 23:46 dice: “Padre, en tus manos encomiendo mi espíritu” (profetizado en Salmo 31:5), y luego murió. Las últimas palabras de Jesús fueron: “Consumado es” (Juan 19:30). Las palabras “Consumado es”, en griego son lo mismo que en hebreo. Significa que todo está cancelado.
Salmo 22:31. Este pasaje dice: “pueblo no nacido aún, anunciarán que Él hizo esto”. Esto es cierto. Nos han anunciado a nosotros que Jesús vino al mundo; vivió y murió en la cruz para salvar a los pecadores.
¡Cuán grande es nuestro Dios! ¡Cuán grande es su amor por nosotros! Pero esto no es todo, pues el Salmo 22 también habla de su resurrección.