PASAJES PARA ESTUDIO: Salmo 2:1-9; 22:22-31; 16:10; 110; 72:
45.
LECTURA DEVOCIONAL: Salmo 8.
VERSÍCULO PARA MEMORIZAR: Hebreos 12:2.
PROPÓSITO
Apreciar la posición que Dios Padre ha dado a Cristo en el Reino de los Cielos, donde vamos a gozar en su presencia.
INTRODUCCIÓN
Supongamos que usted toma el periódico y lee los artículos. Imagínese que arriba de todos están escritas estas palabra: “DIOS TIENE CONTROL SOBRE TODO”. Para los que no creen en Dios, estas palabras serían confusas; pero para nosotros serían palabras de esperanza y fortaleza. Por supuesto que Dios tiene control sobre todo.
Dios nos ha dado orden para que hagamos la parte que nos corresponde (I Timoteo 2:1-4). En este caso es necesario que nos hagamos las siguientes preguntas: ¿Está satisfecho Dios con la manera en que se realizan las cosas en la Iglesia? ¿En su pueblo? ¿En la nación? Nosotros tenemos la responsabilidad de orar para que Dios pueda obrar y efectuar cambios que beneficien a todos.
Los pueblos casi siempre hacen cosas pecaminosas, y aparentemente nadie los controla. Dios soporta esas acciones pecaminosas por las siguientes razones: 1) Él es misericordioso y les da tiempo para que se arrepientan. 2) Para darles lugar a que lleguen a los límites de su rebeldía, es decir, hasta donde ya no haya esperanza de que se arrepientan. Recordemos lo que dice Génesis 15:16.
Los israelitas se quedaron en Egipto hasta que los habitantes de Canaán aumentaron sus pecados en forma deliberada. Cuando esto sucedió, la paciencia de Dios llegó a sus límites, y entonces vino sobre ellos el juicio divino por medio de Israel.
I. LOS PODEROSOS MORTALES Y EL ETERNO DIOS
Este Salmo narra la manera en que los reyes se levantan contra el ungido de Jehová, o sea, contra Jesucristo. Hace dos mil años los líderes judíos, Herodes y Pilato, hicieron todo lo que podían para destruir a Jesús (Hechos 4:25-28). Se burlaron de Él, y le dieron muerte por medio de la crucifixión; pero Cristo resucitó victorioso al tercer día. Mientras que estos líderes permanecen en sus tumbas hasta hoy.
En nuestros días la historia no ha cambiado. Son pocos los líderes mundiales que siguen y aman a Jesús. Los gobernantes hacen pactos, firman tratados y después hacen guerra, y no toman en cuenta que el Dios eterno nos demanda ser pacificadores. En el fin del tiempo, la batalla de Armagedón, todos los gobernantes se unirán y harán guerra contra Jesucristo (Apocalipsis 16:13-21). Una vez más, Jesucristo saldrá victorioso y le pondrá fin a Satanás y a los hombres rebeldes que nunca quisieron arrepentirse.
Debemos tener mucha paciencia. Hoy parece que el mal prevalece. Todos hacen lo malo. El pecado se manifiesta ejerciendo su gran atractivo. Los hijos ya no respetan a los padres, y mucha gente opta por desafiar abiertamente a Cristo. Todo esto no debe desanimarnos, porque llegará el día cuando Cristo le pondrá fin a toda forma de maldad.
B. LA REACCIÓN DE DIOS (Salmo 2:4-9)
Dios se reirá de los reyes. Se burlará y luego les hablará en su furor. Dios sabe que los hombres, al desafiarlo, caen en sus propias trampas. Ningún ser humano, por muy poderoso que sea, puede pelear contra Dios.
A veces muchas personas, por problemas personales, optan por retirarse de la iglesia. Sin embargo, estas personas no afectan a la iglesia ni a Dios, sino que caen en sus propias trampas. En este caso la decisión más sabia es humillarse delante de Dios, arreglar la situación con el hermano y pedirle perdón a Dios. Como cristianos debemos estar conscientes de que ninguno que desafía a Dios o se aparta de Él, escapará de las consecuencias.
Vss. 8-9. Jesucristo, el Ungido de Jehová, reinará sobre todas las naciones. En su reinado actuará con justicia y todos serán sometidos a su dominio. Su voluntad será hecha en forma absoluta, y la corrupción será eliminada totalmente. Los asesinos, los ladrones, los adúlteros, los fornicarios, hechiceros, los cobardes y todos aquellos que se oponen a la voluntad de Dios, serán eliminados. Las figuras que se mencionan en el versículo 9 demuestran la severidad con que tratará a sus enemigos: a) “Los quebrantará con vara de hierro”; b) “Como vasija de alfarero los desmenuzará”.
Vss. 10-12. En estos versículos, Dios, por su misericordia, les da una alternativa a los poderosos para que no sufran el castigo divino:
El versículo 12 es una recomendación de honrar al Hijo. El no honrarlo, le trae al hombre consecuencias trágicas; pero los que confían en el Hijo son bienaventurados.
Cuando Cristo murió en la cruz, dos profecías de los Salmos fueron cumplidas.
1. Jesús fue sepultado en una tumba nueva (Lucas 23:50-56). Sin duda José de Arimatea había terminado la tumba para su familia. La había cavado en una roca caliza. La puerta era una piedra redonda que ponían sobre la abertura. El Salmo 16:10b dice: “No permitirás que tu santo vea corrupción”; lo que indica que su cuerpo no experimentaría descomposición.
2. La resurrección de Cristo. El Salmo 16:10a, dice “No dejarás mi alma en el Seol”. Pedro dijo lo mismo en Hechos 2:30-33. La palabra “Seol” viene del idioma hebreo, y “hades”, del griego, y es el lugar de los muertos. Esto se refiere a la resurrección de Jesús. Hechos 13:33 lo afirma más directamente: “La cual Dios ha cumplido a los hijos de ellos, a nosotros, resucitando a Jesús”.
B. EL ANUNCIO DE LA VICTORIA DE JESÚS (Salmo 22:22-28)
Vs. 22. En este pasaje existe un cambio de énfasis, al demostrar seguridad de que su oración había sido escuchada.
Los versículos 22 al 28 contienen un voto de acción de gracias. I Pedro 3:18-19 dice que Jesús fue al Hades y predicó a las almas. Esto indica que fue y anunció su victoria sobre la muerte y sobre el enemigo de nuestras almas, que la salvación había sido provista por medio de su muerte. El que Jesús haya descendido al Hades a predicarle a las almas, no significa darle lugar a los muertos perdidos a que lo acepten. La Biblia no lo dice. Además, “está establecido para los hombres que mueran una sola vez, y después de esto el juicio” (Hebreos 9:27).
Algunos teólogos afirman que Jesús fue a los que estaban en una sección del hades, en el seno de Abraham (Lucas 16:19 – 3), y trasladó a éstos santos al cielo (Efesios 4:8-11).
Vss. 22-24. Aquí se menciona el contenido de su voto. Él prometió anunciar su nombre a sus hermanos. En Mateo 28:10, Jesús les llama hermanos, por primera vez, a sus discípulos. ¿A quiénes les va a anunciar las buenas nuevas? A la congregación en Jerusalén, a los que temen a Jehová, a todo Israel y a todo el mundo. Todo esto tuvo un resultado positivo.
1. ¿CUÁLES SON ESTOS RESULTADOS? Alabanza y gloria (Salmo 22:23).
2. ¿ÉL POR QUÉ DE ESTE RESULTADO? Porque Dios lo había oído y respondido (Salmo 22:24). Dios lo oyó y le contestó después de haber cumplido su misión: Después de su muerte en sustitución nuestra. Todos sabemos que la pena por el pecado es la muerte. Sin derramamiento de sangre no hay remisión de pecados. Sólo la sangre pura y sin mancha del Hijo de Dios pudo limpiarnos de nuestros pecados.
3. ¿QUIÉNES SERÁN RESCATADOS POR EL MESÍAS? Todos los que lo buscan, los humildes (Salmo 22:26) y los que se humillan como niños (Mateo 11:25; 18:3).
4. ¿CUÁL ES EL CLÍMAX DE LA OBRA DE JESÚS? Todos los de la tierra lo adorarán. Él regirá sobre todas las naciones (Salmo 22:27-28).
C. EL SACRIFICIO DE CRISTO NOS ABARCA A NOSOTROS (Salmo 22:31)
Vs. 31. El término “pueblo no nacido aún”, anuncia el nacimiento de la Iglesia. La Iglesia nació muchos años después que se escribió este pasaje. Recordemos que la Iglesia nació después que Cristo triunfó en la cruz.
Ahora que somos miembros de la Iglesia de Cristo, hemos recibido el anuncio de su justicia. Por el mensaje de las buenas nuevas de salvación, hemos experimentado un nuevo nacimiento espiritual. De hecho Cristo nos va perfeccionando cada día más. Nuestro Señor Jesucristo, al cumplir todas las profecías, hizo un sacrificio perfecto que beneficia a todo aquel que en Él cree. Para apropiarnos de estos beneficios, tenemos que leer su Palabra, meditar en ella y aplicarlas a nuestra vida.
La clave de la fe y la salvación es el conocimiento y la obediencia a la Palabra de Dios. Recordemos la fortaleza y la seguridad que tenía el joven del Salmo 1. Esta fuerza era el resultado de la lectura, la meditación y la aplicación de la Palabra de Dios en su vida. Lo que el hombre piensa se manifiesta en su actuar. Pensar en las verdades de la Biblia y aplicarla a nuestra vida, tendrá como resultado actitudes positivas que agradan a Dios.
Cristo el Rey está sentado sobre su trono (I Corintios 15:25; Efesios 1:20-22). Está sentado porque ya terminó su obra; y, además, está esperando el tiempo del Padre cuando todo estará sujeto a Él.
Cristo fue coronado de gloria y de honra, tal como dice el Salmo 8:5: “Y lo coronaste de gloria y de honra”. Al resucitar, Dios lo hizo sentar a la diestra suya, en poder, gloria y honor. Esteban lo vio en Hechos 7:55-56. Pedro también lo dijo en Hechos 2:34-35.
B. LO QUE CRISTO HACE AHORA
Cristo es Sacerdote para siempre (Salmo 110:4). Es mediador entre Dios y los hombres (I Timoteo 2:5). En Génesis 14 se encuentra el relato de Abraham y Melquisedec, rey de Salem, rey de paz y sacerdote del Dios supremo. Él vivió antes del establecimiento del sistema levítico de los israelitas; pero fue reconocido por Abraham como digno de recibir los diezmos del botín de la guerra contra los reyes del valle. No sabemos de sus antepasados, ni de su nacimiento, ni de su muerte. Dios ocultó estos datos para que fuera únicamente una ilustración o tipo del sacerdocio de Cristo, quien es eterno. ¿Qué hacía el sacerdote de Dios? Representaba al hombre y al pueblo delante de Dios; ofrecía los sacrificios y ofrendas que ellos traían a Dios. Hoy Cristo intercede por nosotros ante el Padre.
David pide por su hijo Salomón y desea que Dios le ayude a ser un buen rey. Además, se describe las cualidades de un rey que se deleita en Jehová, y los beneficios que el pueblo disfruta por sus buenas decisiones.
B. LA GRANDEZA DEL REY QUE SE DELEITA EN JEHOVÁ (12:8-9)
C. BENEFICIOS PARA EL PUEBLO CUANDO CRISTO REINE (Salmo 72:4-17)
El Salmo 72 es una petición del rey David en favor de su hijo Salomón; pero en realidad es un cuadro del reinado de Cristo en el Milenio.
En la actualidad hay opresión y escasez. Los hombres tratan mal a sus vecinos. Existe maltrato mutuo: Los pobres contra los pobres, los ricos contra los ricos, los ricos contra los pobres y los pobres contra los ricos, etc. El que tiene, quiere más; y el que no tiene, quiere tener. Hay guerras y rumores de guerras, enfermedades y muerte, etc.
Este Salmo nos muestra cómo va a ser la situación cuando el Rey Jesús tome el mando de todo.
Vs. 2. En este versículo se dan algunas características del rey: Su gracia, su hermosura, su alegría y su dulzura.
Vss. 3-5. El rey es alabado por su poder. Es presentado como soldado valiente y triunfante que lleva instrumentos de guerra listos para emplearla. La espada (vs. 3) era como un puñal corto de dos filos, aunque también había espadas largas. La pelea, en aquel entonces, no era únicamente con flechas, también era con espadas cortas. Para ganar una pelea, el soldado tenía que ser muy experto, ya que tenía que atacar muy cerca al enemigo. Las saetas agudas indica que no tenía la idea de solamente herir a sus enemigos, sino destruirlos totalmente. En la antigüedad, las puntas de las flechas eran hechas de piedra afilada, de concha y, a veces, de madera fina. El blanco siempre era el corazón del enemigo, no otra parte.
Vs. 6. Habla de un cetro. El cetro era un bastón especial, fabricado con joyas preciosas, que el rey tenía en su mano siempre. Lo extendía sobre la mano o cabeza de una visita a quien quería recibir. Ester 4:11; 5:2 es un ejemplo claro. Cuando un rey no quería recibir a alguien, sencillamente no le extendía el cetro, y los soldados mataban a esa persona.
B. ALABANZAS POR SUS CUALIDADES (Salmo 45:7-9)
Vs. 7. Él ama la justicia y aborrece la maldad. El Rey es veraz, humilde, justo, recto, tiene dignidad moral, tiene pureza infinita, y, además, es completamente santo. Cristo tiene una perfección absoluta.
Sus vestidos exhalan perfume. El secreto para obtener el gozo permanente, está en que le permitamos a Cristo que entre a nuestra vida para que la controle. Cuando hacemos esto, la hermosura de su santidad se reflejará en nosotros.
Vs. 8. Mirra, óleo de alegría y casia. Significa que todo será alegría y no habrá tristeza. Los orientales usaban muchas especies como perfume. Los mencionados acá son los usados en el aceite para ungir en ocasiones especiales. No usaban perfumes en tiempos de tristeza, muerte o dolor.
Vs. 9. Habla de que el rey tendrá muchos hijos e hijas ilustres. La Iglesia, representada por la reina, tendrá oro de Ofir. Ofir era un lugar de Asia donde había mucho oro.
La figura de la reina atendida por el Rey, representa a la Iglesia. Jesucristo promete que la Iglesia tendrá gran honor en el reino y muchos hijos que la honrarán. Cuando Cristo se lleve a su Iglesia, por quien entregó su vida, todos estaremos gozando en el cielo. Nunca más pasaremos penalidades como aquí en la tierra. Estaremos con Cristo por toda la eternidad; gozaremos de su presencia, escucharemos su voz y le alabaremos por siempre.